El Lomi Lomi es un masaje originario de las islas hawaianas, con raíces aborígenes y étnicas, ha sido practicado por los hawaianos por más de 4000 años con fines terapéuticos y como medicina preventiva para mantener la salud.
El Lomi Lomi es una modalidad de masaje que practican las Kahunas. Kahu es una voz hawaiana que significa “guardián”, la palabra huna significa “secreto”, lo cual convierte a las kahunas en “Guardianas del secreto”.
La kahuna inicia el tratamiento lavando al receptor con una esponja mojada en té de hierbas, canta y anuncia los beneficios que aportarán el contacto de sus manos y de las piedras calentadas al fuego. Combina las piedras con aceite de coco y almendras dulces para dar masaje a los músculos y articulaciones del cuerpo. Para realizarlo trabaja con pases fluidos, rítmicos y profundos basados en los movimientos del océano, aúna técnicas de masaje y de osteopatía de manera simple, natural y placentera, devolviendo salud al cuerpo, proporcionando un sentimiento de unidad a la mente y experimentando una conexión con la naturaleza y con el espíritu.
Los practicantes del Lomi Lomi utilizan con mayor intensidad los codos y los antebrazos, el masaje está enfocado al tratamiento de los tejidos internos por lo que se convierte en un masaje relajante muy placentero. Los antiguos sanadores hawaianos trataban el cuerpo y la mente a través de la filosofía Huna combinando el masaje, la geoterapia y la aromaterapia.
El Lomi Lomi suele ser profundo e intenso con un componente espiritual muy definido. Así, se convierte en una de las formas más profundas que existen de masajear el cuerpo. Intenta conseguir la armonía total trabajando todos los músculos del cuerpo, facilitando el paso de los fluidos energéticos. El terapeuta realiza movimientos rítmicos que consiguen crear unas ondas sobre el cuerpo que resultan apacibles y vigorizantes al mismo tiempo.
Antiguamente las kahunas vestían con trajes ceremoniales y creaban un ambiente que infundía una mentalidad curativa en el receptor. En cuanto a lo que hacían –la curación propiamente dicha- era una imposición de la mente sobre la materia. El paciente que estaba tendido en la camilla tenía que aceptar el hecho de que la persona que le aplicaba el masaje podía canalizar un nivel superior de energía.
Pero eso ya no ocurre en la actualidad, la diferencia esencial entre el Lomi Lomi actual y cualquier otro masaje reside en la secuencia y manipulaciones -uso de los antebrazos y amplios movimientos con las manos- así como la incorporación de algunos elementos a su rutina habitual, tales como el uso de aceite de coco, costalitos repletos de hierbas con té, pareos, flores, esencias y música hawaiana de fondo.
Cuando la masajista saluda con la palabra aloha, sabe lo que representa: aloha significa que la respiración de dios está en nuestra presencia. El Lomi Lomi da la potencia, la vitalidad y el rejuvenecimiento del cuerpo. No es lo que usted espera, es lo que usted se siente.
En la tradición hawaiana el masaje es muy importante en los momentos de cambio y en los pasos determinantes de la vida: durante el embarazo y después del alumbramiento las mujeres reciben Lomi Lomi. La familia celebra la bienvenida a la vida entre cantos, mimos, suaves masajes y flores. A lo largo de su vida y ante cada compromiso vital el Lomi Lomi aporta bienestar y equilibrio en todos los aspectos del ser, incluso cuando es hora de devolver el cuerpo a la tierra se agradece la experiencia en una emocionante celebración, se da y recibe Lomi Lomi para honrar a la conciencia del cuerpo.
Hawai nos ofrece este regalo de salud, bienestar y abundancia de amor, recordándonos la alegría de cuidar nuestro bienestar. ¡Descanse y deje que la fuerza curativa de la kahuna fluya desde sus manos hasta su cuerpo para que le haga sentir bien y libre de cualquier dolor!
Natividad de Jesús Cisneros Victorino.
